Ejército ofreció excusas públicas por permitir el asesinato del comunicador Efraín Varela Noriega.
El comunicador fue asesinado cuando salía de un evento en la Universidad Nacional y ya de regreso los paramilitares lo interceptaron. Minutos antes había sido retirado un retén del Ejército, facilitando el accionar del grupo armado ilegal.
EXCUSAS PÚBLICAS
El Comando de la Décima Octava Brigada, adscrito a la Octava División del Ejército Nacional, ofrece excusas públicas por el homicidio del señor Efraín Alberto Varela Noriega e informa a la opinión pública que:
El Honorable Consejo de Estado Sala de lo Contencioso Administrativo profirió la sentencia n° 07001233100020010016200 de fecha 29 de octubre de 2015, donde se halló responsable a la Décima Octava Brigada de su complicidad por el asesinato del señor Efraín Alberto Varela Noriega. El lamentable asesinato que estuvo relacionado con las denuncias de la víctima a través de un medio de comunicación sobre las censurables relaciones de algunos integrantes de las Fuerzas Militares y las autodenominadas autodefensas unidas de Colombia, ocurrió el 28 de junio del año 2002 en el kilómetro 5 en la Vía que del municipio de Arauca conduce al interior del departamento del mismo nombre, a manos de miembros de las extintas AUC. Para el día de los hechos, el dispositivo militar de seguridad fue retirado del lugar donde acostumbraba a permanecer, siendo este un importante corredor de movilidad, razón por la cual el Consejo de Estado reconoció que el asesinato fue facilitado por esta Unidad Militar. En este sentido, la Nación, el Ministerio de Defensa y el Ejército Nacional a través de la Décima Octava Brigada, ofrecen excusas públicas por este asesinato que causó una pérdida irreparable al interior de la familia de la víctima y para la sociedad araucana, pues el señor Efraín Alberto Varela Noriega fue una figura pública bastante reconocida y querida por los habitantes del Departamento, por lo que expresamos nuestra solidaridad. Con este acto, donde la Décima Octava Brigada reconoce sus errores y pide perdón, se pretende no sólo cumplir con una medida de satisfacción, sino reconstruir el tejido social y las relaciones entre individuos e instituciones para lograr la reconciliación, a la vez que se reitera el compromiso indeclinable que tiene el Ejército Nacional para velar porque esta clase de hechos no se repitan en el futuro, así como la condena que se hace a esas repudiables conductas que en nada se ajustan a los lineamientos e ideales del sector defensa.
